La familia es el núcleo de la sociedad. Éste pensamiento se encuentra cada vez más en peligro de extinción, porque hoy en día, para bien o para mal, las cosas son importantes en la medida en la que la sociedad les da importancia. And let’s face it… mucha gente no le da a la institución de la familia la importancia que debería.
Pero hoy no voy a hablar de todos los cambios con los que se enfrenta la estructura familiar contemporánea, quiero simplemente ahondar un poco en la relación que la familia tiene hoy en día con las redes sociales.
Hemos llegado al momento en el cual no sólo los jóvenes de dieciséis años están en contacto con las redes sociales, existen niños de ocho años con página de facebook y señores de sesenta con cuentas de twitter, las redes sociales han pasado de ser algo de “moda” a algo de la vida diaria, pareciera que facebook, twitter, youtube, myspace, tumblr, foursquare y otras redes sociales como el rock & roll llegaron para quedarse, y como el rock representan en muchas ocasiones una nueva brecha generacional en las familias contemporáneas.
Las redes sociales se vuelven extensiones de la vida de las personas, los momentos de esparcimiento, estudio, problemas, ideologías, todo lo que una persona es y vive tiene un reflejo en las redes sociales, los padres e hijos se encuentran repentinamente ante una disyuntiva “¿dejo que mi papá me siga en twitter?” “¿le hago a mi hijo una solicitud de amistad en facebook?” las redes sociales reflejan como un espejo de agua clara las relaciones familiares, he escuchado de amigos “yo bloqueé a mi mamá de mi facebook, no dejaba de molestar con las fotos que subo” o “Desde que mi papá tiene twitter dejé de usarlo, siento que me vigila todo el tiempo”. Y qué es esto sino una manifestación de la relación misma, el padre que se preocupa por sus hijos y los respeta lo suficiente como para dejarlos tener privacidad en la vida diaria, será el padre que se encuentre entre los contactos de facebook de sus hijos, porque ellos han aprendido a dejar a sus padres entrar en su vida, los padres que viven criticando las amistades de sus hijos y cuestionando cada movimiento que realizan porque no confían en ellos serán bloqueados por sus hijos en las redes sociales.
Las redes sociales nos acercan más, el problema es que no todas las familias están lo suficientemente cerca de “la vida real” como para permitir este tipo de cercanía en la realidad virtual de las redes sociales.
-C.R.A.